Existen muchos álbumes ilustrados con una temática alrededor de la aceptación de uno mismo, de la lucha contra el menosprecio de los demás. Y, si bien son muy predecibles y obvios, no cabe duda de que más de una vez puden ayudarnos a explicar o quitar importancia a las burlas tan comunes a esas edades. Y, bueno, los hay con más o menos gracia u originalidad pero algunos son verdaderas joyas, como es el caso de “Orejas de mariposa”.
Mara es una niña de la que se burlan en el colegio gracias a sus grandes orejas. Cuando llega a casa triste, su madre, le explica que tiene orejas de mariposa, que “revolotean sobre la cabeza y pintan de colores las cosas feas”. A partir de entonces, cada vez que sus compañeros se meten con ella, la niña, lejos de enfadarse, da una graciosa explicación a cada una de las burlas, como que los zapatos que lleva no son viejos, que son zapatos viajeros; o que no es que le rujan las tripas, es que lleva una orquesta en la barriga… en fin, una manera de no dar importancia a las burlas como táctica para que te dejen en paz…
Y esto me lleva a pensar que, tal vez, deba o debiera haber algún álbum para trabajar la empatía, para educar a los que están al otro lado hostigando… pero, sin animalitos que se den cuenta de que su amigo oso se ha podido enfadar por su comportamiento… me gustaría algo más obvio, más real… del tipo: eso que acabas de decir o hacer ha tenido y tendrá estas consecuencias en este niño… No sé, estoy muy cansada y cada vez aguanto menos a las personas que como diversión tienen la burla o el maltrato hacia los demás. Y digo personas, en general, porque no es algo propio de la niñez. De hecho, muchas veces, los adultos funcionan como ejemplo para estos individuos en edad infantil (por no usar otra palabra más malsonante, que últimamente me dejo llevar…)
Pero, es verdad y hablo en serio cuando digo lo del álbum para trabajar la empatía, la sensibilidad… que muchas veces bien merece la pena acercarse a esos niños y averiguar el por qué de ese comportamiento… Otras no, todo hay que decirlo, que siempre hay gente que es así y… ya está, es así…
En fin, mientras espero encontrar este cuento, os dejo con “Orejas de mariposa” que escribió Luisa Aguilar e ilustró André Neves en 2007 y, un año más tarde, lo publicó la editorial Kalandraka. Lo encontraréis, también, en la biblioteca de mi pueblo, de Bétera. Hasta la semana que viene…