The Cat in the Hat

Aunque ya he traído alguna vez algo de Dr. Seuss por aquí, se me hace difícil repetir con este autor porque es muy raro encontrar buenas traducciones de sus libros. De hecho, en este caso, recomiendo encarecidamente leerlo en inglés, su idioma original.

Y es que lo peculiar de este autor, aparte de sus geniales personajes fantásticos que ilustran todos sus libros haciéndolos tan característicos, lo peculiar, digo, es el texto en verso tan y tan surrealista y gamberro que también constituyen su firma. Así que, un texto con estas características, se convierte en tarea difícil para un traductor. Las veces en que la versión en castellano ha merecido la pena, demuestra, no solo el dominio de la disciplina por parte del traductor, sino la imaginativa, el ingenio para que, irremediablemente, se pierda la traducción literal pero, no así la rima y el contenido loco, absurdo que hacen tan encantadores los escritos de Theodor Seuss.

Me consta que se han publicado más traducciones pero, francamente, la edición en castellano de 1967 bien merece obviarla. Pero bueno, lo dicho, os aconsejo que lo leáis en inglés para, así, no perder la frescura y la rima original. Vale la pena.

“The Cat in the Hat”, lo escribió e ilsutró Theodor Seuss Geisel, Dr. Seuss, en 1957 convirtiéndose en un clásico que edita una y otra vez, como bien se merece, la editorial Random House en su colección Beginner Books.

¡Hasta la semana que viene!

El mar dijo ¡basta!

Y, en este momento en el que el cambio climático y sus devastadoras consecuencias, entran en las perversas “trending topics”, guardémonos de ellas. Reflexionemos y actuemos pero con inteligencia, con serenidad y perseverancia. Que nunca está de más que estos y otros temas preocupen cada vez a más gente pero ojo con el oportunismo de algunos sujetos que, lejos de preocuparse, sacan tajada del asunto… Y no hay nada más peligroso que la desinformación, el populismo y el movimiento en masas de manera irreflexiva… En fin, el ser humano…

Pero bien, para ayudar a formar personas con ese espíritu crítico tan necesario en la actualidad, siempre podremos acudir a libros tan reflexivos, tan educativos como el que traigo hoy. El mar está cansado, cansado de la cantidad de personas que navegan sobre él, de la cantidad de animales que viajan a través de él y, harto, pega una sacudida y con un magnífico tsunami, da la vuelta al mundo. Todos los comportamientos, todas las costumbres se vuelcan y un nuevo orden social, tanto humano como animal, nace y, por tanto, unos y otros se ven forzados a entenderse para poder convivir. Y, no es tan difícil: al fin y al cabo, tampoco somos tan diferentes…

Interesante, imprescindible lectura de mano de Comotto, quien siempre transmite algo de esa manera tan ingenua, tan sensible y tan hermosa como solo él sabe hacer. Ilustraciones expresivas, dinámicas y frescas que las hacen, también, inconfundibles.

Así que, sí, “El mar dijo ¡basta!”, lo escribió e ilustró Agustín Comotto en 2006 y, ese mismo año, lo publicó por primera vez la editorial La Galera.

¡Hasta la semana que viene!

Cuentos por correo

Si bien la era del correo postal está claramente en declive, sin embargo, es curioso como, el gesto de tirar una carta en un buzón de correos con el deseo de que un ser querido reciba ese escrito suyo, sigue llamando la atención a los niños. Es pura magia, es un doble “me acuerdo tanto de ti”, es la impaciencia por la llamada de la otra persona (varios días después de haber llegado a casa tras un viaje) diciendo que, por fin, ha llegado su postal desde… ¡Me encanta!

Por eso, buscando qué regalar este año a los niños de esta, mi casa, y que estuviera relacionado con esta magia que, comento, es para ellos, encontré esta magnífica idea de Raquel Díaz Reguera: cuentos escritos en ocho postales que mandas, al niño en cuestión, en ocho envíos. Al final, cuando el niño tiene reunido todo el cuento, que habremos enviado poco a poco, puede leerlo de principio a fin, sin interrupción, y construir el puzle de la ilustración cuyas piezas son cada una de las entregas. La idea es que, tras la última entrega, se le dé ya en mano una caja donde pueda guardarlo. De esta manera puede descubrir la identidad de esa especie de amigo invisible que ha estado enviándole postales todo ese tiempo. Yo, sin embargo, he preferido modificar algo estas instrucciones para que se adapten mejor al día de Reyes… complicado pero factible (creo).

La colección de “Cuentos por correo”, la componen varios títulos a elegir: “Dibujos animados”, “El bolso rojo”, “El ratón más grande del mundo”, “La doncella, el vestido y el amor”, “Lunes y sin embargo viernes” o “Un deseo gigante”. La idea original, el texto y, por supuesto, las ilustraciones, son de Raquel Díaz Reguera y fue publicado por primera vez en octubre de 2017 por la editorial “Tres Tigres Tristes“.

¡Hasta la semana que viene!

Qui ha vist l’Home dels Nassos?

No es a cosa hecha pero, en estas fechas, me inclino a hablar más de esos álbumes para niños que hablan de las tradiciones de este, mi lugar. Y, hoy, a cuatro días para que acabe el año, os traigo esta broma o tradición de algunos lugares de España como es “El Hombre de las Narices” o, en catalán, “L’Home dels Nassos“. El día 31 es costumbre por aquí preguntar a los niños si ya han visto a “L’Home dels Nassos, que té tants nassos com dies li queden a l’any” (El Hombre de las Narices, que tiene tantas narices como días le quedan al año). Los niños, imaginan un hombre con un montón de narices hasta que, por fin, caen en que solo queda un día para que acabe el año, así que el personaje que buscan solo tiene una nariz.

En “Qui ha vist l’Home dels Nassos?”, es precisamente esta broma la que le gastan a Jan, un niño que pasa la tarde del día 31 en su casa entre el ajetreo y los preparativos para la cena de fin de año. Alentado por su tío, saldrá a la calle para buscar a “l’Home dels Nassos” y todas las personas con las que se cruce le preguntarán lo mismo: “Ja has vist l’Home dels Nassos?” (¿Ya has visto al Hombre de las Narices”). Y, claro, poco a poco, el niño se irá frustrando y, por fin, algo triste, decidirá regresar a casa donde, al fin, entenderá la broma o la tradición de la que ha formado parte.

“Qui ha vist l’Home dels Nassos?”, lo escribió Annabel Sardans y lo ilustró Isaac Bosch en 2003 y, ese mismo año, lo publicó la editorial La Galera.

Y, en fin, solo me resta desearos un muy buen 2020. ¡Feliz año nuevo y hasta la semana que viene!

Cómo esconder un león en Navidad

A veces, no queda claro para quién se escriben ciertos álbumes ilustrados. Me explico: evidentemente, tienen magníficas y atractivas ilustraciones, el texto es sencillo tanto tipográficamente como en su sentido, pero, sin embargo, no sabes muy bien para qué hacer llegar ese mensaje a un niño, cuando él lo tiene más que claro. Quizá debiéramos ser los adultos los que tuviéramos que tomar nota del asunto…

Iris se dispone a pasar las fiestas navideñas con su familia en casa de su tía. La niña tiene como mascota un león (estas son las pequeñas exageraciones que hacen entrañable a la literatura infantil) y, por supuesto, quiere llevárselo consigo, pero sus padres no lo ven claro y deciden dejarlo solo en la casa. La niña se marcha sumamente triste pero el animal se escapa y sigue a la familia sin que esta se percate. Al final, el león, encuentra la casa de la tía, no sin antes vivir ciertas aventuras navideñas que, desgraciadamente, hacen más común el discurrir del cuento. Pero, lo significativo de este cuento es que, estar con el león era lo que la niña quería y lo que, al final, con el reencuentro, la hará feliz, más allá de la infinidad de regalos o comidas opíparas… Pareciera un llamamiento para los adultos hacia las verdaderas necesidades de los niños que, muchas veces, son más bien sencillas…

En fin, “How to Hide a Lion at Christmas”, publicado en 2018, conforma la secuela navideña de “How to Hide a Lion” (2010), libro con el que la autora e ilustradora, Helen Stephens ,comenzó la que parece estar siendo una colección fructífera con otros títulos publicados. La editorial Beascoa está siendo la encargada de traducirlos al castellano y al catalán.

¡Hasta la semana que viene!

Una pesadilla en mi armario

Muchos son los álbumes que tratan el terror nocturno con simpatía y restándole importancia: monstruos que habitan bajo la cama de un niño, ogros que hacen demasiado ruido y no permiten dormir o, como es el caso de este viernes, una pesadilla que vive en el armario de una habitación. Y, claro, el niño, decidido, se enfrenta a su miedo, sin saber que más miedo tiene su pesadilla que, cuando le ve apuntarle con un rifle de juguete, comienza a llorar de tal forma que, el niño, por temor a que despierte a sus padres, decide meterlo en su cama para que se calme.

Divertido, con un enfoque que, si bien no es original, sin embargo resulta muy atractivo y, desde luego, efectivo. Con unas ilustraciones que recuerdan a Sendak y su famoso “Donde viven los monstruos” (este sí diría que fue el original) escrito cinco años antes pero, aún así, resultan atractivas y acompañan perfectamente al texto.

“There’s a nightmare in my closet”, lo escribió e ilustró Mercer Mayer en 1968 comenzando así una serie (“There’s a…”) que se conformaría con la publicación de otros títulos ya en los años 80. En 2001, Kalandraka, lo tradujo al castellano y, bueno, como es buena costumbre en esta editorial, en todos los idiomas peninsulares.

¡Hasta la semana que viene!

Te desafío a no bostezar

No soy muy aficionada a los álbumes infantiles donde se alecciona al niño a hacer, sin rechistar, todo aquello que viene a ser rutina y nuevas responsabilidades, tal como lavarse los dientes, ir al baño solo o, la obligación que nos ocupa hoy, irse a dormir. Pero, este caso, es diferente y divertido. Un niño que habla de lo traicioneros que son los bostezos: aparecen cuando menos te lo esperas, sin avisar. Así que lo mejor es evitarlos a toda costa. Y para ello, el personaje de este libro nos aconseja alejarnos de los peluches, no contar ovejas, evitar cuentos sobre animales dormilones… Todo antes que bostezar porque, si lo haces y tus padres te ven, acabarás inevitablemente en la cama… un día más…

Y es curioso porque, cada vez que leo este cuento, no puedo evitar un gran bostezo y, en mi caso, como adulta, un anhelo de mi cama y almohada… Ironías de la vida…

En fin, “I Dare You Not to Yawn”, lo escribió Hélène Boudreau y lo ilustró Serge Bloch. En 2013, Barbara Fiore Editora lo publicó en castellano y, también, en catalán.

¡Hasta la semana que viene!

Once damas atrevidas.

Lo que primero me llamó la atención de este álbum fue su estética. Una portada colorida, con dibujos de unas mujeres montadas en motos y sidecars y con un toque muy femenino en cada una de ellas. Sin duda, la mano de una mujer estaba detrás de esas figuras…

Y lo abrí, comencé a leerlo y comenzó el ritmo y la rima en un texto divertido que nos muestra todo aquello que hicieron juntas cuatro amigas atrevidas. Viajar… a países exóticos, al desierto, a Rusia… escalar el Everest… Y, como si en cada destino cada una fuera encontrando su sitio en el mundo, poco a poco van quedándose, repartidas por el mundo, hasta que queda solo una, que decide regresar…

Preciosa adaptación de un cuento popular sobre unas vidas atrevidas, unas vidas de amistad y locura, que siempre está bien tener un poco. Texto e ilustraciones se funden perfectamente aunque no sean de la mismo autor. Muy recomendable.

“Once damas atrevidas” (en gallego, en el original) lo escribió Xosé Manuel González “Oli” y lo ilustró Helle Thomassen en 2001, año en que también lo publicó la editorial Kalandraka.

¡Hasta la semana que viene!

El oso que no estaba

Un álbum surrealista, con un personaje, el oso, que aparece de la nada y trata de descubrirse a sí mismo, ya que no recuerda o no sabe nada de él mismo y, lo que va conociendo, le gusta. Como quien sale un día de casa y va juntando pistas acerca de su propia personalidad y todo lo que reúne es de su agrado y por tanto, es feliz. Un hacer tabula rasa contigo mismo y comenzar a quererte, a entenderte y quererte tal como eres. Bonita iniciativa…

Claro que la historia no es tan concreta ni clara, esto es lo mejor de este álbum. El sinsentido te hece sonreír, te hace seguir leyendo y te hace encariñarte con ese oso tan sincero, tan sencillo, sin complejos ni complicaciones… es fácil quererse…

En fin, “Der Bär, der nicht da war”, lo escribió el polifacético, Oren Lavie, en 2014 y, en 2015, Barbara Fiore Editora, lo publicó en castellano.

¡Hasta la semana que viene!

El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza.

Uno de los álbumes más conocidos de los ilustrados por el gran Wolf Erlbruch y uno de los preferidos, siempre, por los niños por el tema escatológico en cuestión y que tanto gusta a esa edad.

Seguro que ya lo conocéis: un topo que se despierta con un excremento encima de su cabeza e, indignado, comienza por toda la granja a buscar al responsable con un firme propósito de venganza que, finalmente, llevará a cabo.

Divertido, espontáneo, irreverente y editado en diferentes formatos de los cuales destacaría la edición pop-up en la que, moviendo las pestañas, los niños juegan con los escrementos de los animales, ¡genial!

“Vom kleinen Maulwurf, der wissen wollte, wer ihm auf den Kopf gemacht hat”, lo escibió Werner Holzwarth y, como ya he dicho antes, lo ilustró Wolf Erlbruch en 1989 y, ya en 2007, lo tradujo al castellano la editorial Alfaguara.

¡Hasta la semana que viene!